1. |
Réquiem
04:27
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"Réquiem"
Réquiem por el hombre
de alas cercenadas
que cae en el suelo
y atraviesa el fuego.
Réquiem por el resistente
que con tantos alambres
eleva su aliento
a filos de cimitarra.
Réquiem por las luces bohemias
en la ciudad del destierro,
alumbrando fantasmas
del amor y el mal vino.
Réquiem por un campesino,
por quien no tiene camino.
Y al labrador de su alma,
que Dios bendiga su cama.
Réquiem por tu cuerpo esta noche,
cuando la lluvia preludia
la tierna melancolía
de nuestras carnes cobardes.
Réquiem por esta colada
de los trapos más sucios
del hoy y el ayer que aspiran
al adiós a la ingratitud.
Réquiem por las velas prendidas
de todas aquellas plegarias
que el viento no supo azotar.
De hilos cortantes pende la vida.
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2. |
Los peces asustados
04:23
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“Los peces asustados”
Bajé a la playa
y observé el mar;
y los peces asustados
una vez más me vieron llegar.
Pronto vendrán los bañistas
en degradados Sorollas:
cubos, rastrillos y palas
y bocadillos con entre restos de Albal.
También subí a una azotea
plantado como esas antenas
abierto en cruz y también en canal
dije “ Ícaro lo tuyo no es volar.”
Y en estas horas tan bajas
de los túneles del alma,
tu asuencia ya se presenta
como una punzante espiral.
El latigo del corazón
sacude latidos de dolor
Los hechos de ayer
son los deshechos de hoy.
El recuerdo graba la memoria,
la memoria agita el deseo,
el deseo anula tu acción
y tu acción se vuelve seguro error.
Y en estas horas tan bajas
de los túneles del alma,
palabras mayores en paños menores,
asisto ingrávido al funeral del deseo.
Y es que he querido nadar
y es que he intentado volar.
Solo soy un viejo árbol
plantado con la semilla del mal.
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3. |
El preso y la fuga
04:01
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“El preso y la fuga”
Llevas colgado al cuello el silbato
para llamar al amor perro ingrato;
tienes una extraña manera de huir
con gorro orejero y en un zepelín.
La carretera es una oportunidad,
ese puente infinito
para cruzar el llanto.
La noche te estrelló y cubrió de brea
todos tus rostros cruzados
Y por las aceras
viajas sin tu cruz
mientras te alumbra la luz
verde de un semáforo.
Sin señal del preso ni la fuga,
no hallarás castillo sin presidio,
No verás los valles ni los páramos
Ni al amor colgado de un árbol.
Eras el viaje sin billete de vuelta
de improbable absolución del pasado;
corrías con flato para llegar al bar,
te bebías todo el material
Todo corría en tu contra,
apuntabas maneras:
eras el hombre que siempre meaba fuera
Sin señal del preso ni la fuga,
no hallarás castillo sin presidio,
No verás los valles ni los páramos
Ni al amor colgado de un árbol.
En las alambradas lograbas
ser un pájaro espino
con un lugar en el mundo.
Tienes la fantasía de caminar por el suelo
y de respirar trozos de cielo
Buscando el oro,
acababas con todo
en un callejón
de los bajos fondos de Esmirna.
Sin señal del preso ni la fuga,
no hallarás castillo sin presidio,
No verás los valles ni los páramos
Ni al amor colgado de un árbol.
Sin señal del preso ni la fuga,
no hallarás castillo sin presidio,
No verás los valles ni los páramos
Ni al amor colgado de un árbol.
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4. |
Distopía en la granja
03:14
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“Distopía en la granja”
Hace calor ,
huele a veneno;
no hay dinero,
Tampoco chicas.
El perro suda y pierde el olfato
en los días de lluvia.
Todos se drogan
a mi alrededor;
yo lo tengo prohibido
hasta por prescripción.
Música de cañerías
escupe la gris avenida.
¡Dios mío que ratas
hay en estas cloacas!;
me enseñan los dientes,
sonrío paciente.
Veo a la gente montando en cerdo,
vasallos valientes.
País de toros de lidia,
lo que vende una Biblia.
Nunca en tu nombre
pararán las naciones.
La realidad
me da tanto asma;
todo va bien
por el Wc;
La tele echa datos
de los ciudadanos veraneando.
Vamos de viaje
por el carril de la izquierda
directos al caos;
todo está mal
el apocalipsis vago y escrito
y un buen Orfidal
Viva la muerte
y sus formas de vida
Viva la muerte
por sus formas de vida.
Nunca en tu nombre pararán las naciones.
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5. |
Roto vals
03:28
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“Roto Vals”
Era la noche perfecta para mandar todo a la mierda:
vida en retorno febril para cubrirse entero de lodo.
En los burdeles del arrabal dicen que amar es como asesinar;
y los ángeles anuncian nuestro final.
¡Por favor, whisky con hielo para este dolor!
Y bebí hasta marearme
perdiendo el oremus y la razón.
Ahora recuerdo tus piernas estrangulando mi sexo corrupto;
soy el cancionero más triste sin fe ni palacio y errante en el llanto,
retales de un transeúnte que viaja del ansia a tu ausencia.
Todas las noches son el fin de la historia;
y ahora lentamente me voy a crecer con los muertos
y a mostrar el pánico en cada rincón
o a entonar sin fe ni dios… alguna oración.
Era la noche perfeta para mandar todo a la mierda
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6. |
Nocturno juglar
05:21
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“Nocturno juglar”
En el candor del ocaso
has visto a las fieras parar.
Un gusto meterse en la noche
en armonía y quietud.
No hay nadie;
tampoco lo esperas.
Volutas de humo se van
hacia un cielo estrellado.
Valiente momento de gloria
preñado y sin nada social,
azúcar y algo de almizcle,
cuchara contra el cristal,
sexo hundido en la noche
y un baile a oscuras
sin los fantasmas
de la soledad.
Lejos de toda mirada
no hay dios ni humanidad;
tumbadas imágenes blancas,
borrado ya el ideal.
Patrones sin barco
Y lunas de acero verás
en presente estás
en el útero de la verdad.
Noche de nubes despejada
donde es posible el milagro de amar
y mostrarse ante la nada.
La noche juglar te ofrenda
revelación a cuchilladas.
Noche de nubes despejada
en el incendio de la verdad
y mostrarse ante la nada.
La noche juglar te ofrenda
revelación a cuchilladas.
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